jueves, 31 de enero de 2013

Pingüinos

 
Hace unas semanas el blog registró ya 11 000 visitas. Esto me hace sentir muy orgullosa y feliz. Comencé este pequeño proyecto para compartir una forma de enseñar y aprender en Educación Infantil y cuándo alguien lo visita e incluso deja algún comentario aquí o en mi correo, está contribuyendo a conseguir esa finalidad. ¡Mil gracias!

Esta entrada es otro pequeño regalito. Aquí tenéis un vídeo para que podáis hacer con vuestros hijos o alumnos una escultura representando un pingüino.

Estamos trabajando este año el agua y dentro de ésta, sus estados. Durante el invierno nos estamos centrando en el estado sólido: nieve y hielo. Hemos leído libros sobre animales que vive en los polos y dentro de todos ellos, he elegido los pingüinos para trabajarlos más a fondo porque son animales que a los niños les gustan mucho y además, en mayo iremos a Faunia y realizaremos allí un taller sobre estos animales.
Los pingüinos los hemos hecho en el tiempo de juego por equipos por las tardes con mis alumnos de 5 años. Podrían hacerlos perfectamente niños de 4 años, bien con esta masa o con plastilina. También se pueden hacer con arcilla pero como la habíamos usado hace muy poco, yo decidí cambiar de material.

jueves, 24 de enero de 2013

Taller de problemas: Por cuatro esquinitas de nada


Estoy realizando un taller de problemas con mis alumnos de 5 años. Los jueves a última hora, la mitad de la clase va a la sala de ordenadores con Laura, la maestra de apoyo; y la otra mitad se queda conmigo en el aula haciendo el taller.

Cuando los niños llegan al nivel de 5 años empiezan a realizar operaciones de suma y resta. Nosotros llevábamos resolviendo problemas sencillos en los que intervenían estas operaciones desde el curso pasado sin plasmarlas es una operación "escrita". Con 4 años eran capaces de pensar en la situación problemática y dar una solución poniendo o quitando dedos (a veces otros elementos). Cuando aparecieron las sumas y las restas este curso, noté que de repente dejaban de "escuchar" qué decía el problema y mecánicamente sumaban o restaban los datos que aparecían. Esto les hacía fallar siempre que no era un problema de cambio creciente o decreciente o que la incógnita no era la cantidad final de elementos.

Empecé a leer artículos sobre la resolución de problemas con niños de Educación Infantil y que recogían experiencias de realización de talleres de problemas en las aulas. Y me animé a comenzar con él con la finalidad de dotar a los alumnos de estrategias que les permitiesen resolver problemas independientemente de la operación que implicase. Quería que hiciesen suyo el problema, lo comprendiesen y, con todos los materiales a su alcance, lo representasen y diesen una solución. 

El desarrollo y la fundamentación teórica de estos talleres los podéis leer en este artículo: Resolución de problemas para el desarrollo de la competencia matemática en Educación Infantil. 

En cada sesión del taller yo planteo uno o dos problemas que surgen de un cuento que previamente hemos leído varias veces y que, por tanto, conocen bien. Estas semanas estamos realizando las sesiones correspondientes al maravilloso cuento Por cuatro esquinitas de nada. Lo hemos leído muchas veces, lo hemos visto en vídeo en la PDI y casi nos lo sabemos de memoria.


Yo dejo en las mesas en las que se desarrolla el taller: cubos encajables multilink, ábacos, pinzas de colores, folios y lápices. Se plantea el problema: Si un cuadradito tiene 4 esquinitas, ¿cuántas esquinitas tienen 3 cuadraditos en total? Es un problema de multiplicación pero casi todos los niños han sido capaces de resolverlo usando los materiales disponibles.

Las estrategias que han utilizado han sido:
  • Dibujar 3 cuadrados y contar las esquinas. Algunos niños han dibujado 4 argumentando que eran 3 los cuadraditos que se añadían al que ya estaba dentro.
  • Encajar 3 cubos y contar los vértices de una de sus caras.
  • Apilar o reunir cuatro cubitos por cada cuadradito y contar los cubos que tienen al final.
  • Separar tres cuentas del ábaco y contar 4 esquinitas "imaginarias" en cada cuenta.


Cuando creen tener una solución, me acerco, la comentamos, me cuentan qué les da y cómo lo han hecho y les animo a intentarlo con otro material o a probar de nuevo con el mismo si ha habido algún error (de conteo, por ejemplo). Después deben anotar o dibujar la solución. Cuando todos los niños lo han resuelto (correctamente o no) hacemos una puesta en común en la que algunos niños nos cuentan cómo han obtenido su solución.

El desarrollo del taller es exactamente igual para el segundo problema planteado con este cuento: Si hay varios cuadraditos en la casa de los redonditos y en total hay 20 esquinitas, ¿cuántos cuadraditos hay? Este problema de división les ha resultado más complejo pero lo han resulto varios alumnos de las siguientes formas:

  • Dibujando un número al azar de cuadrados, contando 20 esquinas, borrando los cuadrados sobrantes y contando los que quedan.
  • Numerar esquinas mientras se dibujan los cuadrados y parar al llegar a 20.
  • Encajando o cogiendo 20 cubos, agrupando de 4 en 4 y contando los grupos.
  • Construír con cubos la casa grande, meter cubos dentro al azar, contar los vértices de una de sus caras y sacar fuera los cubitos sobrantes cuando llegan a contar 20 esquinitas.
 
Podéis ver todas las fotos de las estrategias usadas por los alumnos en este álbum: 

Taller de problemas: Por cuatro esquinitas de nada

Os recomiendo que leáis el artículo enlazado y muchos más que podéis encontrar en internet y llevéis a cabo el taller. Es muy satisfactorio ver cómo los alumnos se implican en los problemas y les dan vueltas y vueltas hasta que consiguen dar con una solución. Además, es muy enriquecedor para los maestros ver cómo llevan a cabo estrategias de resolución muy alejadas de las que usamos los adultos. Conociéndolas, podemos plantear matemáticas realmente adaptadas a ellos y que les hagan evolucionar desde esas estrategias inicales.

Podemos conformarnos con que sumen y resten y hagan problemas en los que haya que aplicar mecánicamente estas operaciones, pero yo creo que de esa forma no adquieren las herramientas necesarias para "hacer matemáticas" y aplicar éstas a la resolución de problemas que se les pueden plantear en su vida cotidiana y a lo largo de su escolarización.

Si el cuento no lo tenéis, os recomiendo que lo compréis para vuestra "biblioteca infantil". Lo podéis encontrar aquí. 

jueves, 17 de enero de 2013

Simetría a los 5 años

En mi centro estamos trabajando en Infantil con un método de la editorial Bruño. Y de las 24 fichas que tiene cada uno de los 13 cuadernillos, suelo tener que arrancar una media de 4 por lo absurdas que son y lo poco que se ajustan a la manera que tienen los alumnos de 5 años de desarrollar sus capacidades. El resto no son una maravilla pero entre unas y otras reforzamos el aprendizaje de la lectoescritura, hablamos de aspectos relacionados con la vida en sociedad o nos sirven para "evaluar" aprendizajes adquiridos por la vía de la manipulación y la experimentación.
Espero que los autores del método no estén convencidos de que con sus fichas de matemáticas y las cuatro propuestas de ampliación, los niños de Educción Infantil van a aprender a contar, a sumar, a restar, a resolver problemas o a identificarlas propiedades de los cuerpos geométricos. Y menos aún, nociones de geometría como puede ser la simetría.

Para trabajar este concepto se suele recurrir mucho al dibujo: completar la mitad de una cara, poner témpera en la mitad de un folio doblado y ver cómo queda la marca simétrica en el otro lado, unir piezas de puzzle correspondientes a las mitades de objetos simétricos, etc. Pero yo veía que con estas actividades el niño no tenía que tomar demasiadas decisiones en torno a la simetría.

Y buscando encontré un blog maravilloso llamado Reciclando en la escuela cuya autora propone actividades muy variadas para hacer con material reciclado. Y encontré una manera de trabajar la simetría que me gustó mucho. 

Se divide un tablero de contrachapado tamaño A3 en dos partes (yo lo he hecho con una línea). Y a ambos lados se pegan con cola y a la misma distancia las bases de los tapones de los bricks. Después marcamos los tapones con gomets de distintas formas y colores y con dibujos que puedan orientarse (flechas, caras, casas, rayas y puntos, arcos, semicírculos, etc.). 
Nosotros colocamos tapones en un lado de la línea de simetría y los niños deben completar el otro lado haciendo que quede simétrico. Yo empecé usando solo los tapones con gomets de colores y formas, en los que no había orientación. Jugamos todos en la asamblea dos veces y el material empezó a formar parte del rincón de lógica-matemática. 
Después de un mes aproximadamente incorporé los tapones con dibujos que podían orientarse. Les costó un poco más colocar correctamente estos tapones pero iremos sacando los tableros al rincón en diferentes momentos del curso y seguiré jugando con los alumnos que tienen más dificultades.
Con dos tableros y los tapones que caben en ellos es suficiente para un rincón con capacidad de 6 niños. En caso de que se ocupasen todas las plazas del rincón, pueden jugar comodamente varios niños en el mismo tablero. A veces he forzado yo esta situación porque resulta muy enriquecedor el modo en el que los niños, con un lenguaje y desarrollo cognitivo similar, se explican entre ellos como colocar los tapones.


domingo, 13 de enero de 2013

Abezoo: La granja de los ruidos

El libro Abezoo, escrito por Carlos Reviejo e ilustrado magníficamente por Javier Aramburu, me parece un excelente recurso para trabajar el lenguaje verbal, oral y escrito, con los alumnos de Educación Infantil. Para los que no lo conocéis, es una recopilación de poesías de animales cuyos nombres comiezan por cada una de las letras del abecedario. Son poesías muy divertidas y muy fáciles de aprender para los niños.

Con mis alumnos lo he usado muchísimo. Empecé a leerles alguna poesía, siempre detrás de la "sonora" y teatral introducción, cuando tenían 3 años. El año pasado, con 4-5 años, cada día elegían ellos dos o tres letras del abecedario y leíamos las poesías correspondientes. Siempre había un "otra vez" así que en el tercer trimestre sabían que poesía correspondía a cada letra y eran capaces de aprendérselas de memoria en poco tiempo y disfrutar recitándolas. Realizamos una actividad con ellas para celebrar el Día del Libro y hacia final de curso, algunos niños eran capaces de leer alguna de las poesías. Este año, los Reyes Magos han vuelto a dejar algún Abezoo en las casas de los pequeños de 5 años ya.

El último día del primer trimestre, las familias de los alumnos son invitadas a las clases de sus hijos para escuchar un villancico que preparamos con los niños. Este año, además del villancico, les recitamos dos poesías del libro Abezoo. No tienen nada que ver con la Navidad, pero para ellos eran mucho más divertidas. Votamos entre todos nuestras dos favoritas y salieron elegidas por mayoría: "Doña Ballena quiere volar" y "La granja de los ruidos". 


"La granja de los ruidos" la recitamos a modo de teatro de títeres. Cada dos niños representaban a un animal portando una marioneta coloreada por ellos e iban diciendo su frase correspondiente de la poesía. Ésto ayudó a varios niños a mejorar mucho la pronunciación, pues sus vocecitas no quedaban tapadas por las del grupo y debían esforzarse más para que se entendiese su frase. Salió fenomenal pero sobre todo, disfrutaron muchísimo en el proceso de construir su títere y aprender dos poesías a las que estaban muy vinculados emocionalmente.

Si no tenéis el cuento, podéis encontrarlo aquí.

En el siguiente álbum (pinchando en la imagen) podéis ver cómo quedaron algunos títeres, descargar las plantillas para realizarlos y las poesías en blanco y negro para que las lean y las decoren:
Abezoo

jueves, 3 de enero de 2013

El cohete: escritura de cardinales y ubicación en la cuadrícula con niños de 5 años

Guy Brousseau, en la Teoría de Situaciones Didácticas, sostiene que para que se dé un verdadero aprendizaje de las matemáticas, los maestros debemos plantear a los alumnos situaciones problemáticas en las que el conocimiento buscado sea necesario para poder resolver dicha situación. 
En el rincón de matemáticas jugamos durante tres días a "El cohete". Los niños de 5 años debían reproducir un cohete cuadriculado decorado por mí con gomets cuadrados de colores, en su cohete sin relleno. Una vez que recibían el cohete modelo y el suyo vacío, me tenían que pedir las pegatinas necesarias y pegarlas correctamente en su cohete. Para "ganar" el juego tendrían que usar la escritura de los números cardinales y orientarse en una cuadrícula; dos conocimientos matemáticos recogidos por el curriculo de Educación Infantil.

El desarrollo detallado de la actividad podéis leerlo en el artículo que he publicado en la revista Edma06, entrando en la página web de la revista o pinchando aquí, para acceder al resúmen del artículo y a la versión en PDF.


Sacar de las aulas las actividades que hacemos es la forma de mejorar entre todos la Educación Infantil; de descubrir que hay otras formas de hacer las cosas que a lo mejor no nos habíamos planteado; de mostrar que lo que creemos complicado, a veces no lo es tanto.
 
¡Os animo a que realicéis la actividad en vuestras clases!


Y aquí puedes ver un vídeo sobre la actividad que hice con mis alumnos de 4 años el curso pasado.