En una entrada anterior describí en qué consistía
El panel de las emociones, que uso muchísimo en el aula, sobre todo en Alternativa a la Religión. En esa entrada (podéis volver a leerla pinchando
aquí) os enseñé cómo usaba yo el panel en 3 y 4 años. Pero el año pasado, con mis alumnos de 5 años, enriquecí mucho la actividad y el panel de varias formas y empleando algunos materiales nuevos:
1. En primer lugar elaboramos una tabla de sentimientos "básicos": alegría, tristeza, miedo, sorpresa, enfado, vergüenza y rechazo. Trabajamos mucho cada uno de estos sentimientos, reconociéndolos en nosotros mismos y en los demás. Así hablamos de cuándo nos sentíamos nosotros alegres, tristes, enfadados, etc., y buscamos personajes de cuentos que se sentían así en algún momento de la historia, analizando por qué. Por supuesto, todo este vocabulario se llevaba al aula cuando se daban situaciones en las que alguno de nuestros compañeros podía sentir sorpresa, enfado, rechazo, miedo, etc.
2. Cuando tocaba Alternativa a la
Religión cada alumno cogía un cartel con su nombre y lo situaba en la
franja correspondiente según el sentimiento que vivía en ese momento y a
continuación tenía lugar un breve diálogo sobre cómo nos sentíamos y
por qué.
3. Cada uno de esos siete sentimientos básicos se desglosa en varios, como podéis ver en la imagen inferior.
Después de varios días trabajando la tabla empezamos a trabajar estos sentimientos "más complejos". De un montón los niños, por turnos, iban cogiendo un letrero con uno de ellos. Lo leían ellos, decían lo que creían que significaba (normalmente tenía que explicarlo yo con ejemplos) y lo ubicábamos en nuestra tabla de sentimientos "básicos". Esta actividad la repetimos en varias ocasiones y dejamos el material algunos días para que lo manipularan ellos libremente en el tiempo de Alternativa a la Religión. Como ya sabían leer, fue muy enriquecedor que leyesen ellos mismos el vocabulario "emocional" y hablasen sobre él al situarlo en las franjas correspondientes.
4. En nuestro
Panel de las Emociones cambiamos las caritas por palabras y jugamos varias veces con él del mismo modo que os expliqué en su momento. Su uso en el nivel de 5-6 años es mucho más enriquecedor porque las conversaciones son mucho más complejas y apreciamos en ellas todo el trabajo en torno a las emociones y sentimientos que llevamos realizando desde 3 años.
Pinchando en el siguiente enlace podéis ver todas estas fotos y alguna más en alta resolución:
Por último os recomiendo un cuento que me compré hace poco con idea de enriquecer aún más el trabajo con los sentimientos. Se titula
¿Cómo te sientes?, el autor es Anthony Browne y la editorial es Kalandraka. En él un mono nos va contando cómo se siente en diferentes momentos para la final preguntarnos cómo nos sentimos nosotros. Lo mejor es que las expresiones faciales son fácilmente identificables y e imitables por los niños lo que posibilita que trabajemos con él desde 3 años.