El viernes estuve en la Universidad Autónoma de Madrid participando de una clase con alumnas del grado de Educación Infantil. Me invitó el profesor Santiago Agustín Ruiz para hablar de la participación de los alumnos en el aula, de cómo organizo yo la asamblea y cómo trabajo que los alumnos sean capaces de expresar progresivamente ideas y opiniones. También le interesaba que contase a las alumnas aquello que yo creía importante que supiesen sobre nuestro trabajo y que probablemente nadie les fuese a decir en la universidad.
Así que dividimos mi ratito con ellas en tres partes: en la primera les hablé de esto último, en la segunda parte hablamos sobre la expresión y participación de los alumnos de Educación Infantil y dejamos una tercera parte para preguntas y comentarios. Por cierto, hicieron observaciones y preguntas muy, muy interesantes.
En esta entrada me gustaría compartir lo que hablamos sobre nuestro trabajo. Sería bonito que todos los maestros/as lectores del blog añadieséis en los comentarios lo que creéis que puede faltar.
I. En primer lugar, animaros porque habéis elegido una profesión maravillosa, que si os gusta, os va a hacer inmensamente felices. Ir a trabajar felices es un premio que no todo el mundo consigue y si trabajáis de maestros de Educación Infantil y os entusiasma, lo podéis ser.
II. Pero os tiene que entusiasmar, no "me gusta un poco" o "bueno, no está mal". El día a día en un cole está compuesto por nuestra actuación directa con los niños y también el trabajo con sus padres, el Equipo Directivo, Monitores de Comedor, etc. Con ellos vamos a tener que enfrentarnos a muchísimas situaciones que no son tan agradables. Además es un trabajo agotador físicamente e implica muchas "tareas" que no se enseñan en la universidad pero que también las hacemos los maestros.
Y, ¿cómo sé si me entusiasma?. Si te encanta el olor a goma de borrar que hay en los coles cuando entras por la mañana. Para mí esta es la metáfora perfecta de "este es mi sitio", "aquí quiero trabajar todos los días". Y si además esto te lleva a no sólo interesarte sino implicarte en la educación de tus alumnos.
III. Si esto no es así, llegado el momento y siendo conscientes de que como en todo, se pasan rachas mejores y peores, no pasa nada por dar un cambio, de rama educativa o de profesión.
IV. Tenéis la suerte de poder cambiar el mundo a través de la educación. Y aquí es esencial tener presente que enseñamos mucho con nuestra actitud y es con ella con la que vamos a conseguir unas generaciones más igualitarias respecto al sexo, personas pacíficas, creativas, organizadas, con iniciativa....Todo ello nos da una enorme responsabilidad por la que tenemos que cuestionarnos con frecuencia si lo estamos haciendo bien.
V. Aprovechad al máximo la formación que recibáis. Os va a permitir enfrentaros a una tarea de gran responsabilidad, justificaros y defenderos. Vuestra formación es la que os va a hacer cuestionaros el trabajo que váis a hacer cada día y la que os dará las respuestas.
No todo lo que váis a ver que se hace en los coles es lo mejor para el aprendizaje de los alumnos de Educación Infantil. Cada vez se "primariza" más esta etapa porque es mucho más cómodo. Tenéis que ser críticos con lo que viváis cuando lleguéis a los centros y para eso necesitáis formación. Y si después decidís que vosotros queréis trabajar de otra forma que sabéis (porque os habéis formado) que es más apropiada, necesitaréis de nuevo lo que hayáis leído para justificar vuestra forma de trabajar "diferente" ante directores, compañeros y familias. La formación es lo que siempre os va a dar la razón.
VI. Para terminar, como me dijo mi amiga Auxi cuando hablaba con ella sobre esta experiencia, el trabajo de maestro de Educación Infantil, cuando lo ejerzáis veréis que es un trabajo que os hará tan grandes que no querréis hacer nada más (salvo perfeccionarlo...)
La experiencia fue maravillosa. Para mí fue otra oportunidad para "aprender a enseñar" y en las alumnas creo que quedó alguna que otra frase o anécdota que recordarán cuando comiencen su camino profesional. Mucha suerte.